asilo, asilo

asilo, asilo
ESCRIBO POR VENGANZA. ESCRIBO PARA LIBERARME. ESCRIBO PARA DESECHAR LO QUE ME HACE DAÑO. ESCRIBO PARA PENSAR QUE SOY OTRA PERSONA. ESCRIBO POR AMOR. ESCRIBO PARA SOPORTAR LA VIDA.

El verdadero Ace

El verdadero Ace
Un día, las hadas, malévolas y traviesas, hicieron una apuesta con los hombres. Dijeron que si lograban crear historias mejores que la vida de ellas, se transformarían en horribles insectos; de lo contrario, ellos desaparecerían de la faz de la Tierra.

Hoy en día, los hombres siguen deambulando por las calles; mientras en los bosques, millones de mariposas revolotean entre los árboles.

Las hadas cumplieron a medias.


Mario Ramírez Monroy


lunes, 2 de diciembre de 2013

Séptimo aniversario (un día atrasado)

Apenas me acabo de dar cuenta de que ayer se cumplieron siete años del nacimiento de este gran blog. De hecho ayer fue un día muy particular, donde pasaron cosas muy raras, llenas de símbolos y demás. De todas maneras se me olvidó la fecha, por primera vez (1 de diciembre de 2006).

Quiero agradecer por un año más de este blog, que nació para poder canalizar muchos de mis demonios  que surgieron a finales de 2006, pero que poco a poco cambió para ser un espacio donde puedo compartir experiencia con todos aquellos que sigan asomándose por aquí.

Las puertas del asilo seguirán abiertas espero por mucho tiempo.

jueves, 28 de noviembre de 2013

Gracias

Como cada año, este blog pretende emular el Día de Acción de Gracias de los estadounidenses. Este año fue muy particular, tanto hubo momentos muy difíciles como otros que me dieron alegría. Sin más, aquí les dejo mi lista.

Gracias porque, a pesar del enorme susto que nos dio mi mamá al principio de año, ahora ya poco a poco a mejorado sus salud, sin contar que hace poco también nos volvió a asustar y de nuevo ya está mucho mejor.


Gracias por la salud de mi papá quien también nos dio un buen susto este año, pero que también salió adelante y ahora está mejor.


Gracias a la maestra María Eugenia Merino por obsequiarme la última edición de su libro y por la dedicación que me escribió. Un regalo muy especial. 


Gracias a Jania Andrea Novelo, a Alejandra Guevara y a todas las personas de Microteatro México por haber seleccionado mi obra El ídolo, para representarla en sus instalaciones.


Gracias a Luis Felipe Tovar por producir El ídolo, al igual que a José Antonio de la O y a Alessandra Pozzo por interpretar a mis personajes. Gracias también a Luis Koellar por dirigir la obra y a Hugo Iturbe por coproducirla. Gracias a toda la gente que fue a ver la obra, y gracias a la maestra María Eugenia Merino, a Jessica de la Portilla, a Édgar, a Gustavo y a Sandra Becerril por felicitarme. (Perdón si les caigo mal por hablar tanto de El ídolo, pero a lo mejor es lo único que pude hacer en el teatro *^^*)


Tengo que agradecerle también a esta obra porque por ella empecé a practicar de nuevo la guitarra.


Gracias al Rolly por regalarme un ejemplar de la Banda Roquera donde aparece un artículo que escribí sobre Tarja Turunen, en verdad fue un gran regalo, muy motivador.


Gracias a Jesús Mora y a Arturo Niño por tener la iniciativa de revivir Arkham. Y gracias a Christian por unirse a nosotros en la batería. Gracias por tener la segunda oportunidad de hacer lo que siempre quise hacer desde niño.


Gracias a los grupos de rock que descubrí este año que me impuslaron a volver a tocar.


Gracias por todo lo que apredí este año.


Y sobre todo, gracias a todos ustedes que siguen visitando este blog, el cual lo he tenido muy decuidado, pero espero pronto tener más temas para que valga la pena llenarlo de entradas. Gracias.

lunes, 14 de octubre de 2013

Blancanieves y la alquimia

En el Diccionario de símbolos, de Jean Chevalier y Alain Gheerbrant, encontré una nota interesante en el significado de alquimia. En la cuarta definición, o cuarto apartado, o cómo se diga, hablan sobre los significados alquímicos en el relato de Blanca Nieves. Aquí lo transcribo.

4. La interpretación alquímica utiliza los símbolos de su lenguaje propio como claves para abrir el sentido escondido de los cuento, las leyendas y los mitos, en los cuales discierne el drama de las perpetuas transformaciones del alma y el destino de la creación. He aquí un ejemplo característico de esta forma alquímica de la interpretación: Blancanieves, es nuestra virgencita, la minera del oro. Los siete enanos o gnomos( del griego gnosis: conocimiento) son el aspecto de la materia mineral en sus siete prolongaciones (los siete metales). Cada enano tiene además el carácter del planeta que lo domina. Gruñón es saturniano, Simplón es lunar, Alegre es venusiano, etc. Pero Gruñón el saturniano es quien proporciona la mayoría de los servicios al grupo y sabe sacarlo del problema en la ocasión. Blancanieves es entregada por la malvada reina al cazador verde para que éste la haga morir. Pero finalmente, después de una muerte aparente, tras haber mordido la manzana maléfica, la virgencita se casará con el príncipe de sus sueños, que es joven y bello. El príncipe encantador es nuestro mercurio filosofal (sabido es que el atributo del mercurio de la mitología es una perpetua juventud de rostro y cuerpo). Y de la unión de este mercurio y de la virgencita (del príncipe y de Blancanieves) surgirá la conclusióin de todos los cuentos: fueron felices y tuvieron muchos hijos... En efecto, la multiplicación hermética obtenida con la Piedra es conforme con el Creced y multiplicaos del Génesis. (Robert Ambelain, Das l'ombre des cathédrales, en TIER, 213).

viernes, 30 de agosto de 2013

jueves, 8 de agosto de 2013

El Ídolo

Estoy muy contento porque Micro Teatro México va a montar una obra que escribí llamada El ídolo. Ojalá puedan verla quienes vivan o vengan al D.F. Será en la calle Roble #3 en la colonia San Rafael (cerca de la estación Buenavista), a partir del 5 de septiembre, muy corta temporada.

martes, 7 de mayo de 2013

Nadie supo ni quiere saber

En una escena del documental Bowling for Columbine, Michael More entrevistó a tres adolescentes en una ciudad de Canadá, uno de ellos era una chica punk de pelo verde. More les preguntó qué pasaría si, por alguna razón, cerraran todas las escuelas del país. La punk, tranquilamente, contestó: “No me importaría. Tengo libros. Puedo estudiar en casa”.


Hace pocos días, un amigo me mandó una noticia por Facebook donde habla de la reacción de los fanáticos de Justin Bieber, quienes se enfurecieron al saber que, en un concurso, su ídolo no recibió el premio como mejor artista canadiense del año, sino quien lo ganó fue un tal Leonard Cohen.

Cuando era adolescente, a muchos de mis amigos y a mí nos gustaba saber sobre los grupos de rock de los setenta y sesenta. Me gustaba cuando por televisión pasaban algún documental sobre The Who, Janis Joplin, Jimi Hendrix, The Rolling Stones y demás grupos y cantantes que comenzábamos a escuchar. Nos encantaba saber sobre la trayectoria de tal cantante o tal músico para tener más conocimiento de ellos. Sin contar que leíamos todos los artículos disponibles en revistas y fanzines de la época. Es decir, nos gustaba escarbar sobre la historia del rock, porque los considerábamos nuestros ídolos, nuestros maestros.

Muchas veces hemos tenido referencia sobre la sociedad canadiense, de su calidad educativa, de que tiene un buen porcentaje de lectores y de la tranquilidad que se disfruta en sus calles. La reacción de los fanáticos de Bieber, quienes incluso en Twitter subieron textos como “¿Quién carajos es Leonard Cohen?” o “¿Yo por qué demonios tengo que saber quién es Leonard Cohen?”, me puso a pensar en muchas cosas.

Espero no decir tonterías (por lo regular, siempre las digo). Tal vez se vale que a ellos no les guste ni les interese Leonard Cohen. Recuerdo que cuando era adolescente sólo me gustaba el rock y no los demás géneros. Sin embargo, creo que ninguno de mis amigos ni yo jamás habríamos atacado a un artista como David Bowie. A pesar de que en aquella época su música no nos gustaba, sabíamos quién era, y por supuesto mostrábamos nuestro absoluto respeto.

En muchas partes del mundo, como es sabido, hay pocos lectores. No quiero pensar (de nuevo les recuerdo que siempre me equivoco y cometo estupideces) que muchos de los adolescentes canadienses ya no les guste leer o investigar por estar pegados en la computadora. Claro, el internet es la mejor herramienta que jamás hayamos tenido; ahora, muchísimo conocimiento está en nuestras manos. Pero también tienen la opción de sólo entrar en lugares como los clubes de Bieber y las redes sociales, sin nunca acceder a ningún sitió llamémosle cultural o de información.

Tampoco para nada estoy estigmatizando las redes sociales, al contrario. Se ha demostrado que es una estupenda herramienta. Pero, repito, probablemente a muchas personas sólo les gusta distraerse y nada más. Reitero, no quiero decir una estupidez, pero, ¿no podría pasar que a estos adolescentes la computadora los aleje de la lectura y todo lo demás, a pesar de que se la pasan mal escribiendo?

En verdad espero estar (como siempre) equivocado. También hay que pensar que, incluso, en los países con un alto índice de lectores, el porcentaje es de aproximadamente el 30%, tal vez menos, no es un 90% como creen muchos. Tal vez los adolescentes que subieron tan lamentables tuiters estén dentro del porcentaje que nunca lee y, por lo tanto, Canadá siga teniendo la misma calidad cultural. Es más: tampoco estamos seguros de que todos los tuiters sean de canadienses; a lo mejor la mayoría son de gringos o de otro país, así sería más comprensible.

Quisiera pensar que sólo los no lectores fueron quienes expresaron su enfado, porque, por lo regular, las personas de más cultura prefieren permanecer en silencio.



De todas maneras, hay cosas peores, como la deformada y melosa versión del Aleluya de Cohen en voces de Il Divo. Toda una profanación.